La voz grave y profunda en esta canción fue lo primero que
me llamó la atención. La interpretación me parece que tiene algo mágico, y es
que él canta con un tono vocal que nos hace saber que disfruta de lo que está
interpretando, podemos sentir que casi sonríe frente al micrófono mientras nos
canta esta canción y toca la guitarra a un ritmo más lento.
Aunque no se trata de una producción muy pulida, sí conserva
un tono orgánico y atrayente, porque la canción se siente honesta en cada uno
de sus tonos y su interpretación vocal. No oculta sus errores ni resalta sus
virtudes a través de complementos, todo lo que escuchamos viene de manera natural.
En una parte de la canción cuenta con el sonido de una armónica que hace sonar
al tema con un toque luminoso y una guitarra que, sin muchos arreglos, tiene una
atmósfera reverberante. Este tema logra atraparnos por su espíritu de garage
rock.
¡Este tema se siente orgánico y honesto en cada nota!