Un pop punk rítmico con voces femeninas que brillan es lo
que nos ofrece este tema, cuya base melódica se encuentra, mayormente, en la
batería que la acompaña. Y es que ese sonido pulsante es de lo mejor de la
canción, al igual que la interpretación que se percibe como una charla, pero
también como una interpretación digan de un grupo de porristas. El que no se quede en un solo tono de interpretar hace que esta canción sea atractiva y
llame más la atención.
El tema tiene un tono irónico y humorístico que logra
mezclar con la crítica hacia la expectativa cultural de que tener hijos es el
siguiente paso a una vida adulta. Esta canción está dedicada a quienes buscan
romper el molde y salirse de lo que la sociedad espera que hagamos. Es mejor
definirse cada quien con sus propios términos, porque cada quien crece a su
manera y a su tiempo.
¡Este tema es un himno irreverente a la autonomía!