Lo que me llamó la atención de este tema es el tono de voz
de Cristian, tiene uno muy parecido al de Miguel Bosé, pero suena un poco más
profundo y melódico. Si interpretación se percibe tranquila, como si te
quisiera envolver lentamente en lo que está cantando y te lleva suavemente a
esta atmósfera tranquila. No es el fin de un mundo, pero sí es un lugar en
donde hay pasividad.
La música también es envolvente, cada sonido representa un
paso a esta inmersión sonora. Primero con la batería que va marcando el sonido,
y luego con el bajo que se siente oscuro y profundo. El tema se siente nostálgico
y melancólico, en donde la guitarra canta a la par de nuestro intérprete. Aunque
la producción no está pulida al 100% es como meterse a un ensueño, en donde todas
tonalidades se fusionan para hacerte navegar este mundo sonoro que juega con las
sensaciones.
¡Déjate llevar por “Fin de un mundo"!