El sonido que te va envolviendo en ondas sonoras es lo que abre
con este tema, al menos por los primeros 20 segundos se siente como un tema
futurista, hasta que llegamos a la guitarra y la batería, no explotan, pero se
hacen más presentes en el tema que habla sobre estas personas que creen
representar a Dios, y bajo este contexto buscan manipular y controlar a las
personas. Quien canta no lo hace como
reclamo, nos narra una historia de cómo se mueven este tipo de personas,
quienes disfrazan de amor la represión.
Esta canción es un llamado a no caer ante los engaños de El
Predicador, y lo hace con un tema que por momentos te hace sentir fuera de este
mundo, con una calma que se impone a los sonidos de guitarra pesados, es como
si nos estuvieran cantando con suma tranquilidad para entender este mensaje.,
para luego transformarse en una canción más acelerada, con un riff que se
siente con fuerza y una voz más grave de la que ya habíamos escuchado.
¡No caigas ante El Predicador, mejor dale play a este tema!