Este
tipo de canciones me suenan como salidas de un juego o de alguna caricatura
japonesa, y es que conserva esa gracia y honestidad en la interpretación que la
convierten en una canción que se puede escuchar con tal inocencia. La melodía
emplea tonos electrónicos, inspirados en la estética de los animes. Además, la
interpretación se caracteriza por este sonido casi infantil, que de momentos
revienta o suena con más poder y fuerza.
Conforme va pasando la canción te adentras a este mundo que
no precisamente está dentro del nuestro, y es que en el minuto 1:44 hay un
cambio importante en cuanto al tema y su sonido, suena un poco más como rap melódico,
con beats que se marcan con fuerza, en un tema que está diseñado para
disfrutarse en cualquier momento. La voz y la melodía sin duda van a cambiar tu
día, de cierta manera, todo brilla y eso se percibe desde la primera escucha.
¡Este tema parece salido de una historia de anime!
