Desde Baltimore llega este proyecto que nos trae una canción con un estilo vibrante de pop alternativo, que nos regala un sonido enérgico que aporta una sensación de emoción palpable, pero a la vez inexplicablemente trae algo de melancolía, producto de la dulce y aguda voz, que añade un toque íntimo y emocional, la cual nos permite conectar perfectamente con la canción. A pesar de este sentimiento melancólico, la vibra general que emana de esta composición hará que te sientas motivado y lleno de energía, porque tiene un ritmo acelerado y constante que destaca por su nivel de producción, que nos entrega texturas donde la base de percusiones, combinada con las guitarras aportan dinamismo y una sensación de estar en movimiento.
La parte que definitivamente hizo que esta canción fuera guardada favoritos, es la transición del puente, que llega a la marca de 0:58, para meter freno en mano, como una forma de administrar toda esta descarga de energía. Esta pausa deja el protagonismo completamente a la voz, para después regresar con el sonido principal que los había estado acompañando hasta ahora.
